Publicado el

Hasta aquí hemos estado de cachondeo, ahora hablamos en serio

Esta es una frase que suelo decir cuando hago algo nuevo que considero retador, o si doy algún paso adelante importante en alguno de mis proyectos personales, o a veces simplemente porque me he comprado alguna herramienta nueva que considero muy pro.

Cualquier situación de esas en las que tienes la sensación de que has dado un salto cualitativo. De que todo lo anterior, por más bueno que fuera y por más en serio que te lo tomaras, no era más que una preparación para lo que viene a continuación y que será mucho mejor.

¿No tienes tú esa sensación también algunas veces, cuando tomas alguna decisión o das algún paso importante? Pues esto es lo que está ocurriendo estos últimos meses en mi proyecto de escultura.

El camino hasta aquí

Cuando dejé mi anterior trabajo para dedicarme a crear esculturas, a finales de 2019, me convencí de que trabajando por cuenta propia me convenía buscar más de una fuente de ingresos, de lo cual sigo estando convencido y si estás en esa situación, te lo recomiendo sin duda.

Empecé alguna cosa que no tenía nada que ver con mi trabajo en el taller, lo cual en seguida vi que no era buena idea. Una cosa es diversificar y otra cosa es dispersarse. Más valía que mi actividad secundaria fuera algo que significara trabajar en el taller, algo próximo a lo que ya hacía.

Así que cree jardindeacero.com y ¿sabes qué pasó? que fue un éxito, modestia aparte. De hecho a día de hoy sigue gustando a mucha gente y creciendo. Lo malo fue que lo que iba a ser una actividad secundaria se comió a la que quería que fuera la principal. Cada vez tenía más seguimiento, más demanda y más trabajo que hacer. 

Las esculturas no quedaron en el olvido ni mucho menos. También vendí unas cuantas y recibí encargos interesantes que llegaron a buen puerto, nunca paró del todo. Pero creaba pocas cosas nuevas, ya que el pan de cada día, la actividad constante y los ingresos recurrentes venían del otro lado. 

Poner toda tu energía e ilusión en algo no garantiza el éxito. No ponerlas garantiza el fracaso.

Este año he incorporado un ayudante al taller y he modificado algunas cosas, sacrificando rentabilidad para ganar el tiempo que necesito para crear mis esculturas y continuar con mi proyecto artístico. Y el primer paso es, evidentemente, crear nuevas piezas, investigar, arriesgar y desarrollar una colección de esculturas con mi estilo propio. 

Así que efectivamente, hasta aquí hemos estado de cachondeo. Todo lo anterior sólo era un ensayo, un prototipo de lo que viene a continuación. A partir de aquí hablamos en serio, empieza lo bueno de verdad, y te invito a que me acompañes y seas partícipe de todo ello.